Tacos de suadero y diabetes: ¿Un antojo riesgoso para la salud?

Los tacos de suadero, un platillo tradicional de la cocina mexicana, son reconocidos por su sabor fuerte y su textura jugosa. Sin embargo, su consumo frecuente puede representar un riesgo para quienes tienen diabetes, debido a su elevado contenido en calorías y grasas, alertan especialistas en salud metabólica.

El suadero es un corte de carne de res que se cocina en su propia grasa o aceite, y se suele servir acompañado de tortillas de maíz, salsas y, en muchas ocasiones, bebidas con azúcar. Esta combinación puede dificultar el control de los niveles de glucosa en sangre, incrementar el colesterol y favorecer la aparición de enfermedades cardiovasculares, especialmente en personas con diabetes tipo 2.

El principal inconveniente del suadero es su alto contenido en grasas saturadas. Un consumo excesivo de estas grasas puede elevar el colesterol LDL (colesterol “malo”) y aumentar el riesgo de enfermedades cardíacas, uno de los principales problemas de salud vinculados a la diabetes.

Asimismo, las tortillas de maíz que acompañan al platillo aportan carbohidratos que, si no se controlan, pueden causar picos en los niveles de azúcar en sangre. Por lo tanto, una comida que parece sencilla puede desestabilizar la glucosa en personas con diabetes si no se planifica correctamente.

Otro aspecto importante a considerar es la cantidad total de calorías consumidas. Al ingerir varios tacos junto con salsas cremosas, guarniciones fritas y bebidas azucaradas, una sola comida puede superar las necesidades calóricas recomendadas para una persona con diabetes, afectando su control de peso y glucosa.

Por eso, los expertos sugieren limitar el consumo a uno o dos tacos pequeños, preferiblemente preparados con tortillas delgadas de maíz y sin usar doble tortilla. También recomiendan evitar acompañamientos poco saludables como refrescos, cebollitas fritas o nopales cocinados en aceite.

Aunque existen riesgos, quienes padecen diabetes no tienen que eliminar por completo los tacos de suadero de su dieta. Los especialistas indican que pueden disfrutarse ocasionalmente dentro de un plan alimenticio balanceado, siempre y cuando se sigan estas pautas:

• Elegir tortillas pequeñas o usar solo una por taco para reducir los carbohidratos.

• Cambiar las bebidas azucaradas por agua natural o infusiones sin azúcar.

• Agregar vegetales frescos, como lechuga o rábanos, para incrementar la fibra y facilitar la digestión.

• Evitar salsas cremosas o con mayonesa que aumentan el contenido calórico.

• Realizar actividad física ligera tras la comida para ayudar a metabolizar los carbohidratos.

En resumen, la clave está en el consumo moderado, la educación nutricional y una adecuada planificación. Así, los tacos de suadero pueden seguir siendo parte de la vida social y gastronómica de las personas con diabetes sin poner en riesgo su salud.

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