Señales en tu cuerpo de que podrías tener diabetes: ¡No las ignores!

La diabetes es una enfermedad crónica que altera la manera en que tu organismo transforma los alimentos en energía. Cuando tienes diabetes, tu cuerpo no produce suficiente insulina o no la utiliza correctamente, lo que provoca un aumento en los niveles de azúcar en la sangre. A continuación, te mostramos nueve señales que podrían indicar la presencia de esta enfermedad.

Sed excesiva y necesidad frecuente de orinar

Si sientes mucha sed constantemente, incluso después de beber líquidos, y necesitas ir al baño con más frecuencia de lo normal, especialmente durante la noche, esto podría ser una alerta. Cuando el nivel de azúcar en la sangre es elevado, los riñones trabajan para eliminar el exceso filtrando y expulsándolo en la orina, lo que provoca pérdida de líquidos y deshidratación.

Pérdida de peso inexplicable

Si notas que bajas de peso de forma repentina sin cambiar tu alimentación o actividad física, podría ser un síntoma de diabetes. Esto sucede porque, al no poder usar la glucosa como fuente de energía debido a la falta de insulina, el cuerpo empieza a quemar grasa y músculo para obtener energía, lo que provoca la reducción de peso a pesar de comer normalmente.

Aumento del apetito

Aunque estés comiendo más, es posible que sientas hambre constante. Esto ocurre porque las células no reciben la glucosa que necesitan para generar energía. El cuerpo interpreta que necesita más alimento y envía señales de hambre, aunque haya mucho azúcar en la sangre.

Cansancio constante y falta de energía

Sentir fatiga intensa y duradera, incluso tras descansar bien, es una señal frecuente. Esto se debe a que las células no reciben la energía suficiente de la glucosa. Esta situación puede dificultar la realización de actividades diarias y hacer que te sientas agotado.

Visión borrosa

Los niveles elevados de azúcar pueden dañar los pequeños vasos sanguíneos de los ojos, causando que el cristalino se hinche y cambie de forma. Esto genera una visión borrosa que puede ser intermitente. Si notas cambios en tu visión o que esta se vuelve menos clara, es importante revisarlo.

Hormigueo o adormecimiento en manos y pies

Conocida como neuropatía diabética, esta sensación de hormigueo, ardor o entumecimiento en las extremidades es causada por el daño nervioso debido a niveles altos de azúcar prolongados. Puede ser una de las primeras señales de diabetes.

Heridas que tardan en sanar

La diabetes afecta la circulación y el sistema inmunológico, dificultando la cicatrización de cortes, rasguños o úlceras. Si tus heridas tardan mucho más tiempo de lo normal en curarse, esto es una señal de alerta.

Infecciones frecuentes

Las personas con diabetes tienen mayor riesgo de sufrir infecciones, especialmente en la piel, las encías o el tracto urinario. Esto sucede porque el exceso de azúcar crea un ambiente favorable para bacterias y hongos, y el sistema inmune puede estar debilitado.

Piel seca, con picazón o manchas oscuras

La deshidratación por la micción frecuente puede causar sequedad y comezón en la piel. Además, algunas personas desarrollan acantosis nigricans, manchas oscuras y aterciopeladas en áreas como cuello, axilas o ingles, que indican resistencia a la insulina, un factor previo a la diabetes tipo 2.

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