Buenas noticias para mujeres en edad madura: un estudio reciente indica que la terapia de reemplazo hormonal durante la menopausia parece potenciar la efectividad de los medicamentos para adelgazar basados en GLP-1, como Wegovy y Zepbound.
Las mujeres que usaron tirzepatida (Zepbound) lograron una mayor pérdida de peso si también recibían terapia hormonal, bajando en promedio un 17% de su peso corporal en comparación con un 14% en quienes no la usaron, tras un seguimiento de 18 meses, informaron los investigadores en la reunión anual de la Sociedad Endocrina en San Francisco.
Además, un porcentaje mayor de mujeres que combinaron Zepbound con terapia hormonal alcanzaron una reducción de al menos el 20% del peso corporal total, con un 45% que logró este objetivo frente al 18% de las que no usaron la terapia hormonal.
“Estos resultados son los primeros en demostrar que la combinación de tirzepatida con terapia hormonal para la menopausia incrementa significativamente la eficacia del tratamiento en mujeres posmenopáusicas”, explicó la Dra. Regina Castaneda, investigadora en endocrinología de la Clínica Mayo en Jacksonville, Florida.
Castaneda mencionó que estudios previos con semaglutida (Ozempic/Wegovy) mostraron resultados similares.
“El hecho de conseguir estos efectos con un segundo fármaco para la obesidad podría señalar una tendencia general en la efectividad de combinar estas dos clases de medicamentos”, agregó.
Cada vez más mujeres optan por la terapia hormonal para aliviar síntomas de la menopausia, como los sofocos y sudores nocturnos, especialmente después de que estudios recientes indicaron que esta terapia no incrementa de forma significativa el riesgo de cáncer de mama o enfermedades cardíacas, como se pensaba anteriormente.
Los investigadores señalaron que los cambios hormonales en la menopausia suelen provocar aumento de grasa abdominal, pérdida de masa muscular y alteraciones metabólicas que contribuyen al aumento de peso.
En este nuevo estudio, se siguió el peso de 120 mujeres posmenopáusicas tratadas con Zepbound, de las cuales 40 recibían también terapia hormonal y 80 no.
Los medicamentos basados en péptidos similares al glucagón-1 (GLP-1) actúan imitando esta hormona, que regula la insulina y el azúcar en sangre, reduce el apetito y enlentece la digestión.
“La información derivada de este estudio ofrece perspectivas valiosas para diseñar intervenciones más efectivas y personalizadas para el control del peso, ayudando a disminuir el riesgo de sobrepeso y complicaciones asociadas en mujeres posmenopáusicas”, afirmó la Dra. María Daniela Hurtado Andrade, profesora asistente en medicina de la Clínica Mayo.
“Este estudio destaca la urgente necesidad de seguir investigando cómo interactúan los tratamientos para la obesidad y la terapia hormonal en la menopausia”, añadió Andrade.
“Comprender mejor esta relación podría mejorar significativamente la salud y calidad de vida de millones de mujeres posmenopáusicas, además de resaltar la importancia de facilitar el acceso a estos tratamientos para quienes los necesitan”.
Sin embargo, los investigadores señalaron que son necesarios estudios con una muestra más amplia para confirmar estos hallazgos y entender por qué la terapia hormonal potencia la acción de los medicamentos GLP-1.
Finalmente, recordaron que los resultados presentados en congresos médicos son preliminares hasta ser publicados en revistas científicas revisadas por pares.