Google recupera terreno en carrera de IA con Gemini 3

Google demuestra con Gemini 3 y sus chips TPU que ya no va a la zaga en la competitiva carrera global de la inteligencia artificial.

Alphabet Inc., la matriz de Google, está recuperando el terreno perdido en la carrera de la inteligencia artificial, tranquilizando a los inversores con el lanzamiento de su modelo Gemini 3, acuerdos estratégicos para sus chips y un crecimiento sólido en la nube, lo que ha impulsado su valor bursátil hacia los $4 billones.

Google se consolida en la carrera de IA con Gemini 3 y la demanda de sus chips

El panorama de la inteligencia artificial está experimentando un reacomodo significativo. Google, que durante un tiempo fue percibido como rezagado frente a OpenAI, está demostrando con hechos concretos que es un competidor de peso, recuperando la confianza de Wall Street y posicionando sus tecnologías como alternativas viables y potentes.

Avances técnicos y aceptación del mercado

El reciente lanzamiento del modelo Gemini 3 Pro ha sido recibido con elogios por parte de analistas y competidores. La herramienta ha alcanzado los primeros puestos en rankings de evaluación de IA y ha sido descrita por Andrej Karpathy, cofundador de OpenAI, como "claramente un LLM de nivel 1". Google presentó el modelo destacando su capacidad para resolver problemas científicos complejos y abordar fallos persistentes en la generación de contenido.

Por otro lado, la demanda por los chips especializados de Google, las Unidades de Procesamiento Tensorial (TPU), se está acelerando. La startup Anthropic acordó su uso en un acuerdo valorado en miles de millones, y un informe reciente señala que Meta Platforms Inc. estaría en conversaciones para utilizar estos chips en sus centros de datos para 2027.

Impacto financiero y posición en el mercado

La reacción de los mercados ha sido inmediata. Las acciones de Alphabet subieron hasta un 3,22% en una sola jornada, acercando a la compañía a una capitalización bursátil de $4 billones. Desde mediados de octubre, la empresa ha sumado casi un billón de dólares en valor. Este optimismo contrasta con las caídas simultáneas de competidores como Nvidia, que perdió $243.000 millones en valor de mercado, y SoftBank, patrocinador de OpenAI.

"Podría decirse que Google siempre ha sido el caballo negro en esta carrera de la IA", comentó Neil Shah, analista de Counterpoint Research. "[Es] un gigante dormido que ahora está totalmente despierto".

La ventaja de la "pila completa" y la nube

Parte de la fortaleza de Google reside en su ecosistema integral. La compañía es una de las pocas que controla toda la "pila" de computación de IA: desde las aplicaciones que usan las personas y los modelos de software, hasta la infraestructura en la nube y los chips subyacentes. Además, posee una mina de oro de datos provenientes de su motor de Búsqueda, Android y YouTube para entrenar sus modelos.

Su negocio en la nube, Google Cloud, registró ingresos del tercer trimestre de $15.200 millones, un 34% más que el año anterior, impulsado por la fiebre global por la IA. No obstante, aún se mantiene en tercer lugar detrás de Microsoft Azure y Amazon Web Services.

Desafíos pendientes y competencia

A pesar de los avances, Google aún enfrenta desafíos. La adopción de su IA en el sector empresarial aún va a la zaga de la de Microsoft y Anthropic. En el frente del consumidor, si bien su aplicación Gemini cuenta con 650 millones de usuarios, OpenAI reporta 800 millones de usuarios semanales para ChatGPT.

Los analistas coinciden en que el panorama ha cambiado. “Sin duda, es justo decir que Google ha vuelto a la carga con Gemini 3”, afirmó Thomas Husson, analista de Forrester. “Los informes sobre la muerte de Google han sido muy exagerados”.

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