El extracto de marihuana podría reducir la agresividad canina

Un nuevo estudio sugiere que un extracto derivado de la marihuana podría ayudar a reducir la tensión en perros con comportamientos agresivos.

Según una investigación recientemente publicada en Frontiers in Veterinary Science, los perros que consumen cannabidiol (CBD) de forma prolongada terminan mostrando menos conductas agresivas que aquellos que no lo usan.

“Este cambio conductual a largo plazo destaca el potencial del CBD como una posible terapia para los trastornos de conducta en perros”, señaló la doctora Julia Albright, profesora asociada de la Facultad de Medicina Veterinaria de la Universidad de Tennessee, en un comunicado.

Para realizar el estudio, los científicos evaluaron información de más de 47.000 perros recopilada por el Dog Aging Project, un proyecto de investigación de seguimiento continuo en el que los dueños reportan cada año datos sobre sus mascotas.

El CBD, un compuesto de la marihuana sin efectos intoxicantes, se ha venido investigando por sus posibles beneficios en humanos, como el control de convulsiones, el dolor crónico, la inflamación, las migrañas, trastornos neurológicos y problemas del estado de ánimo.

Los resultados indican que más del 7% de los perros en Estados Unidos han recibido CBD o productos derivados del cáñamo, y algo menos del 6% los consume de manera regular.

En promedio, los perros que tomaban CBD eran tres años mayores y presentaban con mayor frecuencia demencia (18%), problemas articulares (13%) y cáncer (10%).

Con el uso constante a lo largo del tiempo, estos animales mostraron niveles más bajos de agresividad en comparación con perros que no recibían CBD, según los datos del estudio.

“En términos de conducta, los perros que consumen productos con CBD durante varios años son inicialmente más agresivos que los que no los usan, pero su agresividad disminuye progresivamente”, explicó el doctor Maxwell Leung, investigador principal y director de la Iniciativa de Analítica, Seguridad y Salud del Cannabis en la Universidad Estatal de Arizona.

No obstante, los investigadores aclararon que no se observaron mejoras en otros comportamientos como la inquietud o la ansiedad.

“La mayoría de las manifestaciones agresivas en perros se relacionan con estrés o ansiedad —una reacción de lucha o huida activada—”, señaló Albright. “Aún no comprendemos por qué solo la agresividad, y no otros comportamientos ansiosos, mostró mejoría con el CBD”.

El estudio no fue diseñado para revelar el mecanismo específico mediante el cual el CBD podría reducir la agresión, por lo que se requieren más investigaciones para confirmar estos posibles efectos tranquilizantes.

Mientras tanto, los expertos recomiendan que, si los dueños deciden dar CBD a sus perros, opten por marcas confiables y presten atención a la dosis, ya que un exceso podría causar malestar gastrointestinal y diarrea.

Los autores señalaron que estos resultados también podrían aportar pistas sobre los posibles beneficios del CBD en humanos.

“Existen muchas similitudes en la forma en que el CBD puede ofrecer beneficios médicos tanto a perros como a personas”, comentó Leung.

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