¿Deberías saber si tienes senos densos? Quizá no, argumentan los expertos

En Estados Unidos, a las mujeres se les notifica cuando una mamografía muestra que tienen mamas densas, una condición que puede dificultar la precisión del examen para detectar cáncer de mama.

Sin embargo, un estudio reciente sugiere que esta información podría generar más inconvenientes que beneficios.

Según investigadores que publicaron sus hallazgos el 3 de diciembre en The BMJ, recibir esta noticia puede aumentar el miedo y la incertidumbre, en lugar de ayudar a las mujeres a comprender mejor su situación.

“El aviso hace que las mujeres se sientan más ansiosas y confundidas, y no les proporciona una mayor sensación de estar preparadas para tomar decisiones sobre su salud mamaria, aun cuando adquieren nuevos conocimientos”, señaló el equipo dirigido por Brooke Nickel, investigadora de la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Sídney, Australia.

En las notas de contexto, los autores explicaron que entre el 25% y el 40% de las mujeres presentan mamas densas.

El tejido mamario denso puede esconder pequeños tumores en una mamografía, dificultando su detección. Además, puede distorsionar las imágenes y provocar resultados falsos positivos que requieren exámenes adicionales.

En 2024, la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos ordenó que todas las pacientes fueran informadas sobre la densidad de sus mamas tras realizarse una mamografía. Otros países, como Australia y Reino Unido, están considerando adoptar medidas similares.

Aun así, los científicos señalan que no está claro si este tipo de información realmente ayuda a las mujeres a tomar mejores decisiones sobre su salud.

Para este estudio, se evaluó a más de 2,400 mujeres australianas con mamas densas mediante mamografías, y luego fueron asignadas aleatoriamente a tres grupos.

Un grupo no recibió ninguna notificación al respecto; a otro se le informó que tenían mamas densas junto con material escrito sobre su significado; y al tercer grupo se le comunicó lo mismo pero con acceso adicional a un video en línea explicativo.

Ocho semanas después, los investigadores hicieron un seguimiento y observaron efectos negativos en algunas de las participantes.

Comparadas con las mujeres que no recibieron la notificación, aquellas informadas de que tenían mamas densas mostraron:

Entre un 28% y un 30% más riesgo de sentir ansiedad

Entre un 76% y un 92% más probabilidad de confundirse

Hasta el doble de intención de consultar a su médico de cabecera para saber cómo proceder

A pesar de esto, incluso quienes recibieron información escrita o un video explicativo no reportaron sentirse mejor preparadas para tomar decisiones sobre su salud mamaria.

El equipo señaló: “Las mujeres notificadas comprendían mejor el concepto de densidad mamaria, pero esto no se reflejaba en una mayor sensación de estar informadas para decidir”.

En sus conclusiones, los autores afirman que “este ensayo indica que la notificación, como estrategia poblacional para informar, podría no ser eficaz, ya que las mujeres no se sienten realmente más informadas”.

El problema de fondo es que no existe una estrategia clara o consensuada sobre cómo dar seguimiento al cribado de cáncer de mama en mujeres con mamas densas.

Aunque técnicas adicionales como ecografías, resonancias magnéticas o mamografías mejoradas podrían facilitar la detección de tumores en estas pacientes, aún no hay guías claras sobre cómo comunicar estas opciones.

“El estudio muestra que las mujeres pueden confundirse y que algunas planean acudir a un médico general para pedir orientación; sin un consenso sobre cómo manejar los casos de mamas densas, los médicos de atención primaria podrían no estar en condiciones de ofrecer recomendaciones definitivas”, concluyeron los investigadores.

Noticias del tema