Cómo identificar un caso probable de sarampión según la Secretaría de Salud

El brote de sarampión que actualmente afecta a 27 entidades federativas continúa poniendo a prueba al sistema de vigilancia epidemiológica.

Ante los 5,357 casos confirmados y 23 muertes registrados hasta el 25 de noviembre de 2025, la Secretaría de Salud ha intensificado la difusión de los criterios clínicos que permiten identificar un “caso probable”. Reconocer los síntomas a tiempo es fundamental para cortar la transmisión y evitar que el virus siga propagándose.

La Dirección General de Epidemiología (DGE) destacó que la primera etapa del proceso de detección empieza con la clasificación de “caso probable”, una categoría crucial que activa la notificación inmediata a nivel nacional. Esta definición aplica para personas de cualquier edad que presenten un conjunto específico de signos clínicos.

Señales que deben encender la alerta

El protocolo establece dos síntomas indispensables para sospechar sarampión: fiebre y exantema maculopapular, una erupción con manchas y pápulas distribuidas por diversas zonas del cuerpo. Además, el paciente debe presentar al menos uno de los siguientes signos: tos, coriza, conjuntivitis o inflamación de ganglios retroauriculares, occipitales o cervicales.

La presencia conjunta de fiebre, erupción y alguno de estos síntomas respiratorios u oculares obliga al personal de salud a notificar el caso de forma inmediata. Esta identificación oportuna resulta clave para aplicar aislamiento y proteger especialmente a los grupos más vulnerables, como los niños de 0 a 4 años, quienes concentran la mayor incidencia.

Cómo se confirma el diagnóstico y por qué es necesario diferenciarlo

Ser clasificado como caso probable no equivale a una confirmación. El diagnóstico definitivo se obtiene mediante análisis realizados por el InDRE, o por asociación directa con un contagio previamente comprobado. Este proceso garantiza que las acciones de salud se enfoquen en los casos reales, evitando confusiones que puedan generar alarmas injustificadas o retrasos en la atención.

Durante la Semana Epidemiológica 47, el sistema de vigilancia reportó 204 casos probables y 30 confirmados. En total, a nivel nacional se han acumulado 12,952 casos probables, lo que demuestra que el virus continúa circulando y que es necesario reforzar la detección en clínicas, escuelas y espacios públicos.

La importancia de mantener la vigilancia activa

Aunque el mayor número de contagios se concentra en estados como Chihuahua, la presencia del virus en 155 municipios obliga a sostener medidas estrictas de monitoreo. Las autoridades comparan la correcta identificación de un caso probable con detenerse ante un semáforo en rojo: es el punto que permite activar acciones inmediatas para contener un posible brote.

Dado que el sarampión es altamente contagioso, contar con definiciones operativas claras es indispensable para mantener una respuesta eficaz. La precisión en los síntomas, la rapidez en la notificación y la confirmación por laboratorio son esenciales para frenar la expansión del virus y proteger a los sectores más vulnerables de la población.

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