Reino Unido anuncia construcción de 12 submarinos nucleares
Keir Starmer anunció la construcción de 12 submarinos nucleares y una inversión millonaria en defensa para enfrentar la creciente amenaza de Rusia y otras potencias.
El gobierno de Reino Unido lanzó un plan de rearme que incluye la construcción de una docena de submarinos nucleares, en el marco de la alianza Aukus con Estados Unidos y Australia. Este anuncio fue realizado por el primer ministro Keir Starmer en Glasgow, donde calificó la amenaza global como “más seria, inmediata e imprevisible que desde la Guerra Fría”.
John Healey, ministro de Defensa británico, puntualizó que la estrategia busca enviar un mensaje claro a Moscú debido a la invasión rusa a Ucrania iniciada en 2022. Además, Starmer confirmó una inversión de 15 mil millones de libras para fortalecer el programa nacional de producción de ojivas nucleares como pilar central de la seguridad del país.
Entre otras medidas, el plan incluye la creación de seis nuevas fábricas de municiones, con una inversión adicional de mil 500 millones de libras. Esta expansión industrial busca garantizar el abastecimiento y la capacidad logística frente a los nuevos retos globales.
Starmer ha enfatizado que el mundo está entrando en “una nueva era” y ha insistido en la necesidad de restablecer la capacidad de combate del Reino Unido para afrontar amenazas de países como Rusia, Irán y Corea del Norte, aunque no mencionó directamente a China.
Rearme y modernización de las fuerzas armadas británicas
El plan contempla además la incorporación de tecnologías avanzadas como inteligencia artificial y drones en las fuerzas armadas. Recientemente, se anunció la creación de un mando especializado en capacidades cibernéticas para operaciones defensivas y ofensivas, en respuesta a la evolución de los conflictos internacionales.
Alianzas estratégicas
La seguridad de Europa y el papel del Reino Unido en la OTAN son elementos clave en la estrategia de defensa. George Robertson, exsecretario general de la OTAN, lidera una revisión estratégica encargada por el gobierno de Starmer para responder a amenazas emergentes y ajustar las capacidades militares nacionales.
A pesar de las limitaciones presupuestarias, el gobierno se ha comprometido a mantener un gasto en defensa del 3% del PIB nacional durante la próxima legislatura, buscando sostener y ampliar la capacidad militar británica en un contexto global marcado por tensiones y competencia estratégica.
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