Raiders buscan frenar a los Broncos

Los Raiders vuelven a casa este domingo para enfrentar a los Broncos en el Allegiant Stadium, en un duelo divisional donde ambos llegan con panoramas totalmente diferentes: 

Las Vegas busca poner fin a una racha de seis derrotas consecutivas, mientras que Denver aterriza como el equipo más encendido de la AFC, con nueve victorias seguidas y marca de 10-2, la segunda mejor de la conferencia.

Pese a este contraste, el ambiente dentro del vestidor de los Raiders transmite seguridad y optimismo.

La mayor duda rumbo al juego es el estado físico de su estrella defensiva, Maxx Crosby. El pass rusher no entrenó ni jueves ni viernes por una lesión de rodilla y figura como cuestionable en el reporte médico. Sin embargo, todo indica que sí podrá jugar. Su presencia es vital para enfrentar a una de las ofensivas más peligrosas de la liga.

“Maxx va a jugar, no me imagino un escenario donde no lo haga”, afirmó el entrenador en jefe Pete Carroll. “Queríamos darle todo el descanso posible. Su intención es jugar, pero aún necesitamos ajustar algunos detalles”.

La línea ofensiva ha sido un rompecabezas a lo largo de la temporada, tanto por lesiones como por el desempeño irregular. La semana pasada, Caleb Rogers y Atonio Mafi se turnaron el puesto de guardia derecho, algo que podría repetirse frente a Denver. Rogers fue tercera ronda del draft, mientras que Mafi llegó como agente libre en la offseason y debutó hasta la Semana 13 contra los Chargers.

“Así se ha dado la competencia. Ambos están muy parejos”, explicó Carroll. “Tienen cualidades distintas y nos gustan los dos. Entrenaron bien esta semana”.

En el enfrentamiento previo entre Raiders y Broncos, hace apenas un mes, la defensa de Las Vegas destacó, aunque finalmente cayeron 10-7.

“Cada semana comienzas desde cero, pero ayuda mucho que los enfrentamos hace poco”, señaló el coordinador defensivo Patrick Graham. “Ya hay familiaridad con gran parte de su esquema. Eso facilita el trabajo, sobre todo en situaciones clave como la zona roja”.

Un jugador nuevo en el roster activo es el novato Greedy Vance, un agente libre no drafteado que fue ascendido esta semana a los 53 jugadores. Ya participó en dos encuentros como miembro elevado del practice squad y ahora podría tener un rol más importante.

“En esta liga encuentras jugadores de todo tipo, pero lo que distingue a Greedy es su competitividad”, destacó Graham. “Eso se ve en juntas, entrenamientos y cobertura en el campo. Valoramos mucho esa actitud”.

En ataque, un problema persistente ha sido la poca efectividad en tercera oportunidad: los Raiders están en el puesto 25, convirtiendo solo el 35%.

“Todo empieza con proteger al quarterback”, explicó el coordinador ofensivo interino Greg Olson. “Pero se requiere de todos: mejores rutas, decisiones rápidas del mariscal, corredores ayudando en protección o como válvulas de escape. La idea es proteger y permitir que los playmakers tengan el balón”.

Desde que Olson tomó el mando ofensivo, el equipo ha mostrado un pequeño repunte, anotando dos touchdowns contra los Chargers tras haber logrado solo uno en cada uno de los tres juegos anteriores. No obstante, ahora tendrán un desafío mayor ante la defensa de Denver, líder de la NFL en capturas con 51 en 12 partidos, más de cuatro por juego.

“Ese es el plan, seguir implementando lo que conozco y adaptarlo a lo que ya había”, comentó Olson. “El staff ha sido de gran ayuda. Cada semana haremos ajustes”.

Denver llega como favorito y con ventaja de dos juegos sobre los Chargers en la AFC Oeste, con solo cinco semanas por disputarse. Para los Raiders, cada partido es ya una final, y romper la mala racha contra un rival divisional enviaría un mensaje importante.

Con Crosby decidido a jugar, una defensa que ya funcionó bien ante Denver y una ofensiva que busca ritmo bajo Olson, Las Vegas tratará de conseguir un triunfo que cambie el rumbo de su temporada.

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