Pedigüeños convierten los puentes en su principal fuente de ingresos
La presencia de pedigüeños y ambulantes en los puentes internacionales persiste, impulsada por los ingresos en dólares que reciben de automovilistas que ingresan al país. Aun cuando se les han ofrecido alternativas formales, muchos rechazan regularizarse y continúan en zonas de alto riesgo vehicular debido a las ganancias que generan.
Ingresos en dólares que superan cualquier empleo formal
Los cruces internacionales se han convertido en el punto más rentable para quienes buscan dinero rápido sin incorporarse a un trabajo regulado. Según la autoridad municipal, varios pedigüeños y ambulantes han admitido que llegan a ganar hasta 150 dólares por día, dependiendo del flujo de paisanos que ingresan a México. Señalan que hay días en los que la afluencia les permite obtener incluso más, mientras que en jornadas de menor movimiento reciben cantidades más bajas, aunque siguen siendo ingresos que superan los de un empleo formal.
A pesar de que se les han ofrecido puntos de venta autorizados, apoyos y mercancía para que trabajen de manera legal, muchos se niegan a abandonar la zona fronteriza. El incentivo del dólar continúa siendo el principal motor para permanecer ahí, pues consideran que ningún empleo digno les generaría los mismos ingresos diarios.
Esta dinámica mantiene activa una actividad ilegal que, además de carecer de regulación, expone a quienes la realizan a un entorno de alto riesgo, con vehículos que avanzan entre filas largas y espacios reducidos.
Retorno constante pese a prohibiciones y advertencias
La autoridad municipal señala que estas personas están plenamente identificadas. Aun cuando los inspectores realizan llamados de atención y los retiran del área, muchos regresan minutos después para seguir pidiendo dinero entre los autos. La reincidencia es constante y responde directamente al beneficio económico inmediato que obtienen.
Inspectores municipales permanecen en los puentes durante toda la mañana para desalentar estas actividades y recordar la prohibición vigente. Actúan como una voz preventiva ante una problemática que, si bien no es nueva, se ha intensificado con el aumento del tránsito y la llegada de paisanos durante la temporada.
Cuando las faltas se repiten, se solicita el apoyo de Seguridad Pública para retirarlos conforme al reglamento. La autoridad recalca que el objetivo no es castigar, sino evitar accidentes y mantener el orden en una de las zonas más transitadas de la ciudad.
Mientras tanto, pedigüeños y ambulantes siguen apostando por una actividad que les deja más dinero —mucho más en algunos días— aun cuando eso implique permanecer en un lugar prohibido y peligroso.
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