Nico Williams empuja al Athletic hacia la victoria ante el Sevilla

El Athletic de Ernesto Valverde, según las estadísticas, no suele empezar la temporada con buen pie.

Las dudas generadas durante la pretemporada —con seis derrotas consecutivas y solo una victoria ante la Ponferradina— podían anticipar un resultado negativo en la Catedral, pero apareció Nico Williams para mantener a raya a un Sevilla que, sin la inspiración del joven rojiblanco, podría haber complicado la Aste Nagusia para la afición bilbaína, aunque influir en estas fiestas es una tarea difícil.

Alineaciones y cambios
Athletic (3): Unai Simón, Dani Vivian, Aitor Paredes, Yuri Berchiche, Jesús Areso (Andoni Gorosabel, min. 82), Nico Williams (Alejandro Rego, min. 82), Íñigo Ruíz de Galarreta (Mikel Vesga, min. 77), Alex Berenguer (Robert Navarro, min. 66), Iñaki Williams, Mikel Jauregizar y Maroan Sannadi (Gorka Guruzeta, min. 66)
Sevilla (2): Ørjan Nyland, Juanlu Sánchez, José Ángel Carmona, Kike Salas, Andrés Castrín (Adnan Januzaj, min. 70), Lucien Agoumé, Stanis Idumbo (Chidera Ejuke, min. 45), Nemanja Gudelj (Marcão, min. 81), Djibril Sow (Isaac Romero, min. 86), Dodi Lukébakio y Akor Adams

Goles: 1-0 min. 35: Nico Williams; 2-0 min. 42: Maroan Sannadi; 2-1 min. 59: Lukebakio; 2-2 min. 71: Lucien Agoume; 3-2 min. 80: Robert Navarro
Árbitro: Francisco José Hernández Maeso
Tarjetas amarillas: Andrés Castrín (min. 5), Lucien Agoume (min. 36)

Si quedaba alguna duda tras el controvertido verano por Nico, los primeros 45 minutos de Liga, con un clima agradable de 24 grados y sin interrupciones por hidratación ni golpes de calor, bastaron para disiparla. Cuando Nico superó a Juanlu y este lo derribó accidentalmente, comenzaron a desvanecerse las últimas tensiones.

El joven provocó el penalti, y en un gesto simbólico y aplaudido por la grada, Iñaki, en su papel de capitán, le entregó el balón para que abriera el marcador de la temporada. Su lanzamiento, al centro, engañó a Nyland y el Athletic se adelantó. Nico celebró el gol besando el escudo, mostrando su hambre de juego y desbordando a los defensas sevillistas, quienes tuvieron que recurrir a agarrones para frenarlo.

Minutos después, tras esquivar a dos rivales, Nico asistió a Maroan Sannadi para el segundo gol. Con esto, cualquier duda sobre su relación con la afición quedó completamente disipada, y la grada lo adoptó sin reservas.

En términos futbolísticos, la primera mitad estuvo dominada por el Athletic, aunque curiosamente las mejores ocasiones fueron para el Sevilla. Tras el descanso, el partido cambió: con menos intensidad rojiblanca y un remate de Nico al poste, los sevillanos ganaron confianza y avanzaron en el campo.

Lukebakio recortó distancias con un potente disparo desde fuera del área. Luego, el Sevilla tuvo varias oportunidades, y a falta de 15 minutos, Agoumé encontró espacio y empató el partido.

El Athletic no se rindió y reaccionó con fuerza gracias a Nico, quien antes de retirarse por molestias físicas, centró un balón que Robert Navarro, recién ingresado, convirtió en el gol de la victoria. Los intentos posteriores del Sevilla no tuvieron éxito.

El equipo bilbaíno supo sobreponerse al bajón tras el descanso y Nico lideró la victoria, comenzando con buen pie la temporada más exigente, con la Champions a la vista. Valverde espera que sus jugadores den un paso más que la temporada pasada, y hasta ahora, frente a un Sevilla sólido pese a sus problemas internos, la primera jornada ha sido prometedora. En Nervión se marcharon con mal sabor de boca, mientras que en San Mamés pudieron disfrutar de un triunfo importante.

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