Los Celtics están de vuelta

Después de un preocupante 0-2 en la serie y sensaciones negativas en los primeros encuentros, los Boston Celtics respondieron con contundencia en Nueva York, venciendo 93-115 a los Knicks en el Madison Square Garden. Esta victoria no solo recorta distancias, sino que devuelve confianza a un equipo que había dejado muchas dudas.

Boston había mostrado una baja efectividad desde la línea de tres en los dos primeros partidos, con apenas 25 aciertos en 100 intentos. Pero en este tercer duelo, Al Horford marcó el ritmo desde temprano, encestando un triple para poner el marcador 2-5. Luego, Jaylen Brown amplió la ventaja con otro triple para el 6-10. Brown fue clave en el primer tiempo con 17 puntos, terminando con 19, y siendo una pesadilla para la defensa neoyorquina. Al descanso, los Celtics dominaban 46-71.

Los tiros de tres fueron el arma principal de Boston. Con otro acierto de Tatum, la ventaja se extendió a 12-27, y con el sexto triple del equipo se fueron arriba 16 puntos (16-30). Pritchard, quien había fallado desde la línea de tres en el primer cuarto, cerró ese periodo con una canasta desde la esquina que dejó el marcador 20-36. Boston no solo superaba a los Knicks en el marcador, también en actitud y precisión.

Mitchell Robinson siguió mostrando dificultades en los tiros libres, fallando sus primeros cinco intentos. El público local celebró con ironía su primer acierto. Cerró con 4 de 12 desde la línea. Mientras tanto, Karl-Anthony Towns se lesionó un dedo, aunque continuó en la cancha, terminando con 21 puntos y 15 rebotes, pero claramente limitado por el dolor.

En el tercer cuarto, la historia no cambió. Los Celtics llegaron a tener una ventaja de más de 30 puntos tras dos tiros libres de Derrick White (48-79), aunque después redujeron algo la intensidad (70-96). Los Knicks, que venían de una racha pobre desde el perímetro, tampoco estuvieron finos en esta ocasión: habían anotado solo 2 de 18 triples hasta el último cuarto, donde mejoraron un poco y cerraron con 5 de 25. Tres triples seguidos, dos de Brunson y uno de McBride, los acercaron a 20 puntos (79-99), pero ya era demasiado tarde.

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