Guardia de seguridad desmiente ser agresor del chofer de ruta 55 y denuncia amenazas

Juan Molina, guardia de seguridad, desmiente su participación en la agresión al chofer de ruta 55 y denuncia amenazas tras confusión en redes sociales.

El guardia Juan Molina enfrenta un linchamiento virtual que ha puesto en riesgo su seguridad y la de su familia, tras ser erróneamente señalado como el agresor del chofer de ruta 55.

Denuncias y amenazas tras confusión en redes sociales

Juan Molina, guardia de seguridad, apareció en un video desmintiendo categóricamente su participación en la agresión registrada el 15 de mayo contra un chofer de la ruta 55. Molina relató que circulan imágenes y publicaciones en redes sociales donde se le vincula injustamente con el ataque, situación que le ha provocado un serio riesgo a su integridad personal.

"Ese accidente no lo provoqué", declaró visiblemente afectado, y denunció que desde entonces ha recibido amenazas de muerte y acoso constante. Una mujer incluso publicó la ubicación de su lugar de trabajo, lo que derivó en que desconocidos acudieran al sitio para buscarlo, aunque, afortunadamente, no lo localizaron.

Hostigamiento y miedo por su seguridad

El guardia detalló que desde que fue señalado sin pruebas vive con miedo permanente por su seguridad y la de su familia. Recibe diariamente mensajes intimidatorios, llamadas anónimas y comentarios violentos en diversas plataformas digitales. Hasta el momento, ninguna autoridad ha brindado protección o intervenido para detener estas agresiones.

Molina pidió enfáticamente a la población y a los medios de comunicación que verifiquen la información antes de compartirla, ya que la difusión irresponsable ha generado un linchamiento virtual que podría escalar a violencia física.

Aclaración sobre el ataque y llamado a la justicia

El guardia reiteró no tener ninguna relación con el ataque ocurrido al chofer de la ruta 55, resaltando que físicamente no coincide con el agresor que aparece en el video original, cuyo rostro y acciones quedan claras en las grabaciones oficiales.

Según los últimos reportes de autoridades locales, el verdadero agresor sigue prófugo y no ha sido identificado públicamente. Sin embargo, Molina señaló que algunos medios continúan utilizando su imagen erróneamente en sus publicaciones, lo que prolonga el hostigamiento y afecta también a sus familiares.

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