Gobierno federal envía 150 militares más a Culiacán ante ola de violencia

El gobierno federal enviará 150 militares más a Culiacán, Sinaloa, para reforzar la seguridad ante una ola de violencia que incluye ataques a casinos.

El gobierno federal enviará 150 militares más a Culiacán, Sinaloa, como refuerzo ante el incremento de violencia en la entidad, que incluye ejecuciones, incendios de inmuebles y ataques a dos casinos en la capital estatal. La Secretaría de Seguridad Pública Estatal (SSPE) confirmó que este contingente se suma a los 180 elementos que ya habían arribado, por orden de la presidenta Claudia Sheinbaum, integrando un operativo de 2,500 efectivos de los tres niveles de gobierno, tras un lunes que dejó nueve homicidios dolosos según la Fiscalía.

Uno de los casinos atacados, el Flamingos en Lomas del Bulevar, fue previamente anunciado en un mensaje anónimo en redes sociales que advertía a la ciudadanía de no asistir. El ataque, que solo causó daños materiales, generó un operativo la noche del lunes 22, donde elementos de seguridad localizaron una mochila con municiones en la zona. Algunos colegios y casinos son señalados por autoridades de financiar a facciones del crimen organizado en la guerra que vive el estado.

Refuerzo militar ordenado por Sheinbaum y despliegue integral

La SSPE detalló en un comunicado que el reforzamiento con 150 militares fue ordenado directamente por la presidenta Sheinbaum. Con este nuevo contingente, el estado de fuerza en Sinaloa alcanza los 2,500 efectivos de los tres órdenes de gobierno, quienes realizan patrullajes y operativos conjuntos en zonas de alta incidencia delictiva. El despliegue busca restablecer el control territorial y disuadir ataques contra negocios y civiles.

Saldo violento y cifras de homicidios en ascenso

Según la Fiscalía General del Estado (FGE), el lunes 22 de diciembre se registraron nueve homicidios dolosos. Además, se agregaron dos asesinatos más de personas que habían sido heridas en ataques los días 12 y 18 de diciembre y fallecieron en hospitales, así como una tercera persona atendida en Cruz Roja cuya muerte aún no se clasifica como homicidio o feminicidio. Estas cifras reflejan la gravedad de la espiral de violencia que afecta a la entidad.

Contexto de la guerra entre facciones criminales

La violencia en Sinaloa está ligada a la disputa entre facciones del crimen organizado por el control de plazas y negocios ilícitos. Los ataques a casinos y colegios responden a acusaciones de que estos establecimientos “lavan” dinero o financian a un bando. La estrategia de terror busca debilitar económicamente al rival y generar un clima de intimidación en la población.

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