Empresas reducen producción en diciembre y dan vacaciones

Empresas reducen producción en diciembre, otorgando vacaciones y ajustando presupuestos para cerrar el año con unión familiar y celebraciones navideñas.

Se baja el ritmo y los trabajadores pueden disfrutar estar con la familia al mismo tiempo que aprietan el presupuesto para cerrar el año con unión, cena navideña e ilusión que acompaña a estas fechas.

En la región Centro, diciembre llega con menos actividad industrial, una estrategia que las empresas aplican cada año para ajustar la producción y otorgar vacaciones aprovechando los días de baja demanda.

En tanto, las familias organizan su economía para hacer rendir el aguinaldo y ahorro, una derrama de diciembre, en preparar la cena navideña y destinar los recursos principalmente al bienestar de sus hijos.

Durante el último mes del año, las compañías metalmecánicas, de autopartes y de manufactura afinan su operación para trabajar con volúmenes mínimos. Para el sector sindical, esta práctica no representa un riesgo laboral ni señales de cierre, sino una medida predecible que permite ordenar tiempos muertos y dar descanso a los empleados sin afectar los procesos productivos, señaló Mario Dante Galindo Montemayor, secretario general de la CTM de Frontera.

Explicó que este esquema se repite año con año. “En algunos casos se les administran vacaciones desde el 23 hasta el 30 o hasta el día 2 o hasta el 7 de enero. Los festivos del 25 y el 1 nadie los trabaja”, detalló.

La demanda baja y la inactividad natural de la temporada permite que el personal se quede en casa sin afectar los compromisos de entrega.

Dijo que en este diciembre, el 24 cae en miércoles, mitad de semana, lo mismo que el día último, así que las empresas se preparan para dar vacaciones esas dos semanas, “La mayoría de las empresas otorgará descanso, el 26 regresa un grupo mínimo y la semana de fin de año también se descansa casi completa”.

Pausas industriales, pero sin señales de cierre

Galindo aclaró que la disminución de ritmo no significa riesgo para los trabajadores. “Seguimos con volúmenes conservadores, pero sin cambios drásticos por ser fin de año”.

A pesar del comportamiento estable en diciembre, el dirigente reconoció que el 2025 será recordado como el año con más pérdidas de empleo en la historia reciente de la organización, con entre 1,600 y 1,800 trabajadores que dejaron de pertenecer a la CTM por paros y cierres.

Empresas, como Nemak, mantienen únicamente actividades de mantenimiento; sin embargo, Galindo externó que eso responde a una estrategia para reactivar operaciones en cuanto el mercado automotriz mejore. “Están aceitando la máquina por si hay que prenderla otra vez”.

Aguinaldo: un respiro para los trabajadores y sus familias

En contraste con la pausa industrial, en los hogares se vive el momento más esperado del año. Felipe Ramos, empleado estatal, comenta que diciembre significa un alivio financiero.

“Vamos a poder disfrutar una canastita extra, el aguinaldo y quizá algún bono. Casi todo irá a la construcción de la casa, la familia va creciendo”, relató. Aunque su empleo es estable, explica que no cuentan con las mismas prestaciones de la iniciativa privada, por lo que deben hacer rendir cada peso.

Muchos de los trabajadores van a descansar casi toda la semana de Navidad y la de Año Nuevo, porque en sus empresas disminuye el trabajo y los patrones aprovechan para dar las vacaciones, comentó.

Para muchos, el aguinaldo ‘tiene nombre’: los hijos

La misma prioridad tiene José Luis Sánchez, trabajador de una empresa local. Para él, el destino del aguinaldo está clarísimo: “Es para los niños, para la ropa y los regalos que necesitan. Ese dinero prácticamente es de ellos”.

Destacó que solo si alcanza, se compra algo para él, “una ropita para pasar los días festivos”.

Recomendó a sus compañeros pensar antes de gastar al recibir ese dinero extra en el presente mes, pues si no hay una planeación, luego no completan y lo ideal es que sea destinado a la familia.

Navidad organizada: cenas, regalos y valores

Para Brenda Orona y Rafael García, el aguinaldo se convierte en la base de la convivencia familiar para organizar la reunión, la cena y los obsequios para los niños de la familia.

En su hogar, Orona comentó que la estrategia incluye un intercambio de regalos que evita gastos excesivos y permite que todos reciban algo. “Primero pensamos en la comida. Llega la visita, llegan los hijos ya casados y los nietos. Así nos ha funcionado”.

Entre descansos laborales, reducciones programadas de producción y aguinaldos destinados casi por completo al hogar, diciembre se convierte en una mezcla de ajustes económicos y esperanza.

Las empresas bajan el ritmo, los trabajadores aprietan el presupuesto y las familias se preparan para cerrar el año con unión, cena navideña y la ilusión que acompaña a estas fechas.

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