Elon Musk se retracta tras ataques contra Donald Trump

Elon Musk expresó arrepentimiento por sus críticas a Donald Trump tras una intensa disputa en redes sociales que incluyó acusaciones personales y amenazas políticas.

El empresario Elon Musk afirmó este miércoles que algunas de sus publicaciones recientes sobre el presidente Donald Trump "fueron demasiado lejos", en una declaración que marca un giro tras la serie de ataques entre ambos difundidos en redes sociales la semana pasada.

Musk, quien apoyó financieramente la campaña presidencial de Trump en 2024 y ocupó un puesto como asesor presidencial encargado de reducir el gasto público, había cuestionado duramente el proyecto de ley presupuestaria promovido por el mandatario, calificándolo de "abominación".

La disputa escaló cuando Trump respondió llamando a Musk "irrespetuoso" y amenazó con recortar subsidios y contratos gubernamentales a sus empresas, entre ellas Tesla y SpaceX. En declaraciones a NBC, el republicano advirtió que el magnate tecnológico “pagará muy graves consecuencias” si continúa oponiéndose.

Durante ese intercambio, Musk incluso sugirió en X que Trump podría estar vinculado al caso del financiero Jeffrey Epstein, aunque posteriormente eliminó la publicación, junto con otros mensajes críticos, incluyendo uno que pedía su destitución como presidente.

De la cooperación al conflicto: un quiebre entre exaliados

La relación entre Musk y Trump comenzó a deteriorarse tras la salida del empresario del Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE), donde colaboraba para reducir costos del aparato federal. Aunque Trump despidió públicamente a Musk con elogios, el tono cambió abruptamente días después.

El magnate sudafricano fue también uno de los principales donantes de la campaña republicana, aportando casi 300 millones de dólares, y llegó a declarar: "Sin mí, Trump habría perdido las elecciones". Esa afirmación fue respondida con ironía por el presidente en su plataforma Truth Social, donde insinuó que eliminar fondos a las empresas de Musk sería una forma eficaz de reducir el déficit.

Las tensiones no pasaron desapercibidas para legisladores conservadores. Algunos instaron a Musk a financiar las primarias contra los republicanos que apoyaron la ley presupuestaria. Esto añadió presión política a un conflicto ya polarizado, con ramificaciones económicas significativas.

La disputa se desarrolló en un momento delicado para la administración Trump, que impulsa su nuevo paquete económico mientras lidia con divisiones internas en el Congreso. Las amenazas de cortar contratos a Musk podrían afectar sectores estratégicos como la movilidad eléctrica y la exploración espacial.

Aunque ambos han mostrado señales de distensión en sus declaraciones más recientes —“Solo le deseo lo mejor”, dijo Trump; “Lo mismo digo”, replicó Musk—, la fractura pública entre dos de las figuras más influyentes del país deja interrogantes sobre futuras alianzas políticas y empresariales.

A pesar del gesto de arrepentimiento, Musk no especificó qué comentarios considera inadecuados, lo que ha llevado a especulaciones sobre la continuidad de su relación con la Casa Blanca, especialmente en temas relacionados con subvenciones federales, energía e innovación tecnológica.

Disputa en redes: impacto en X y en la narrativa pública

El enfrentamiento tuvo un escenario principal: la red social X, propiedad de Musk. Desde ahí se lanzaron ataques, réplicas, acusaciones y finalmente, disculpas. La eliminación de contenidos por parte del magnate también plantea preguntas sobre la moderación de discurso en su propia plataforma.

La relevancia del caso no se limita al plano personal. Las acciones de Musk impactan en los mercados, la política tecnológica y el financiamiento público. En un contexto donde las redes sociales moldean la opinión pública y el debate político, lo ocurrido representa un precedente sobre los límites del poder empresarial y la diplomacia digital.

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