Corina Machado salió de Venezuela en barco hacia Curazao para llegar a Oslo

Según el diario The Wall Street Journal, la líder opositora viajó en secreto a la isla caribeña, lo que podría obligarla a exiliarse tras meses escondida en Venezuela.

La líder opositora venezolana y Premio Nobel de la Paz 2025, María Corina Machado, salió de Venezuela el martes en barco hacia la isla de Curazao para intentar llegar a Oslo y recibir el galardón, según informó el diario The Wall Street Journal citando fuentes del gobierno estadounidense. Aunque no llegó a tiempo a la ceremonia de este miércoles, confirmó que estará en la capital noruega en las próximas horas, en un movimiento que, según el periódico, podría obligarla a exiliarse tras pasar meses escondida en su país.

Un viaje clandestino por mar para eludir al gobierno de Maduro

De acuerdo con el reporte exclusivo del diario The Wall Street Journal, María Corina Machado emprendió un viaje secreto el martes desde Venezuela. Según fuentes del gobierno estadounidense consultadas por el periódico, la líder opositora viajó en barco hacia la isla de Curazao, territorio neerlandés situado a menos de 80 kilómetros de las costas venezolanas.

Desde allí, su objetivo era continuar su trayecto hasta Oslo, Noruega, para asistir a la ceremonia de entrega del Premio Nobel de la Paz 2025, galardón que le fue concedido en octubre.

La confirmación y el posible exilio forzado

Machado no llegó a tiempo a la ceremonia celebrada este miércoles en el Ayuntamiento de Oslo, pero en una llamada telefónica con el Comité Nobel confirmó que "está de camino" y que llegará a la capital noruega en las próximas horas.

El Wall Street Journal señala que este desplazamiento podría obligar a Machado a exiliarse, después de haber pasado gran parte del último año escondida en Venezuela para evitar ser arrestada por el gobierno de Nicolás Maduro. Las autoridades chavistas la consideran inhabilitada políticamente y la acusan de conspiración.

El discurso leído por su hija y la promesa de regreso

Mientras Machado estaba en tránsito, su hija, Ana Corina Sosa, fue la encargada de recibir el premio en su nombre y leer su discurso durante la ceremonia. En él, Sosa aseguró que Venezuela "volverá a respirar" y que "abrirán las puertas de las cárceles" para liberar a presos políticos.

Sosa también anunció que "en unas horas" podrá abrazar a su madre después de dos años de separación. Pese a las implicaciones de su salida, la propia Machado ha expresado su intención de regresar "muy pronto" a Venezuela tras su paso por Oslo, una promesa que enfrenta el enorme obstáculo de su estatus legal y la persecución política en su país.

Un capítulo dramático en una lucha de alto riesgo

El viaje clandestino subraya los extremos riesgos que enfrenta la oposición venezolana y convierte la recepción del Nobel en un evento cargado de dramatismo político. La llegada de Machado a Oslo se anticipa como un momento de alta simbolismo para la causa democrática venezolana, pero también podría marcar el inicio de un nuevo capítulo en el exilio para una de sus figuras más prominentes.

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