Autoridades reportan siete detenidos tras incidente en centro EDR
El personal de seguridad del lugar recurrió al uso de extintores para intentar dispersar a los jóvenes.
Piedras Negras, Coahuila.– Una riña ocurrida en el centro de rehabilitación conocido como EDR, situado en el ejido Piedras Negras, terminó con la detención de siete internos, según el parte oficial de la Policía Municipal. El enfrentamiento, registrado durante la madrugada del martes, volvió a poner bajo la atención pública las condiciones en que funciona este establecimiento, señalado en repetidas ocasiones por operar sin autorización sanitaria.
De acuerdo con los primeros informes, la pelea se originó en el área destinada a castigos. El personal de seguridad del lugar recurrió al uso de extintores para intentar dispersar a los jóvenes involucrados, lo que además provocó daños en distintos objetos dentro del inmueble. La situación fue finalmente controlada y los detenidos trasladados a las instalaciones de la corporación para quedar a disposición de las autoridades competentes.
El centro es dirigido por Eloy Tamez en conjunto con un ciudadano con vínculos en Houston. Alberga a cerca de 200 personas que pagan cuotas de alrededor de 10,000 pesos mensuales por su permanencia, aunque no cuenta con permisos de la Secretaría de Salud ni con personal médico o especializado en adicciones. Su esquema de funcionamiento, basado en aislamiento, labores obligatorias y prácticas religiosas, ha generado constantes reclamos entre familiares de internos y vecinos de la zona.
Las denuncias por hechos violentos dentro del EDR se han repetido en los últimos años. Residentes del sector aseguran que las riñas y agresiones son frecuentes, e incluso recuerdan casos en los que hubo personas lesionadas con armas blancas. Pese a esta serie de antecedentes, el inmueble se mantiene en operación.
A estas críticas se suma el hecho de que la construcción fue levantada de manera irregular sobre el callejón Las Tinajas, sin contar con los permisos de obra correspondientes, lo que ha motivado cuestionamientos sobre su legalidad.
En esta última confrontación, una de las madres de los internos, Mayra Caballero, relató que su hijo, con apenas un mes en el centro, estaba presente en el cuarto donde comenzó la riña. Según su testimonio, los guardias carecen de la capacitación necesaria y el uso de extintores no solo puso en riesgo la integridad de los internos, sino que además causó daños materiales.
La mujer aseguró que, tras el incidente, el pastor Eloy Tamez le solicitó cubrir el costo de un equipo de sonido que resultó afectado. Caballero consideró injusto que se priorice la reparación de objetos antes que la seguridad de los jóvenes y pidió a las autoridades una revisión seria de lo ocurrido.
El caso continúa bajo investigación y en las próximas horas se determinará la situación jurídica de los detenidos. Mientras tanto, el centro EDR permanece en operación, pese a los cuestionamientos acumulados por sus prácticas y por la falta de regulación oficial.
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