Andrés Mountbatten-Windsor asiste a bautizo real tras perder títulos
Andrés Mountbatten-Windsor, hermano del rey Carlos III, asistió en Londres al bautizo de su nieta, su primera aparición en un evento real desde que fue despojado de sus títulos.
Andrés Mountbatten-Windsor, el hermano del rey Carlos III, asistió este jueves al bautizo de su nieta Athena en la Capilla Real del Palacio de Saint James en Londres, marcando su primer evento familiar de carácter real desde que el monarca lo despojara de todos sus títulos de nobleza y condecoraciones a finales de octubre, tras las acusaciones por sus vínculos con el fallecido pederasta Jeffrey Epstein.
Una aparición discreta en medio de la polémica
Andrés Mountbatten-Windsor, de 65 años, llegó al Palacio de Saint James en un vehículo particular y accedió por una puerta lateral, evitando a la prensa congregada. Su presencia en el bautizo de Athena, segunda hija de su hija mayor, la princesa Beatriz, constituye su primer acto de naturaleza real desde septiembre del año pasado, cuando asistió al funeral de la duquesa de Kent.
Un evento familiar sin la presencia de los reyes
El bautizo, celebrado en la Capilla Real, reunió a un pequeño grupo de invitados. Entre ellos estuvieron la madre de la niña, Beatriz, y su esposo Edoardo Mapelli Mozzi, así como su otra hija, la princesa Eugenia, junto a sus respectivas parejas. También acudió el cantante James Blunt. Según confirmaron los medios locales, no estuvieron presentes el rey Carlos III, la reina Camila, ni los príncipes de Gales, Guillermo y Catalina. Sí asistió su exesposa, Sarah Ferguson.
La pérdida formal de títulos y condecoraciones
Esta aparición ocurre después de que, a principios de este mes, Carlos III despojara oficialmente a su hermano de las prestigiosas condecoraciones de la Orden de la Jarretera y de la Orden Victoriana Real. Esta acción siguió a la decisión real de octubre de retirarle todos sus títulos, incluido el de duque de York, su tratamiento de alteza real y su derecho hereditario a ser príncipe, tras la presión pública por sus vínculos con Jeffrey Epstein.
El trasfondo de acusaciones y el acuerdo extrajudicial
La sanción real se produjo después de que se conociera que Andrés mantuvo relación con Epstein más allá de 2010. La atención sobre su caso se intensificó con la publicación póstuma de las memorias de Virginia Giuffre, quien lo acusó de abusos sexuales cuando ella era menor de edad. Aunque Andrés negó las acusaciones, en 2022 llegó a un acuerdo extrajudicial millonario con Giuffre para que retirara una demanda civil en su contra en Estados Unidos.
Pese a haber perdido sus títulos, sus dos hijas, Beatriz y Eugenia, mantienen el tratamiento de princesas. Actualmente, algunos miembros del Congreso estadounidense exigen su declaración, mientras que el movimiento Republic en el Reino Unido busca reabrir una investigación en su contra.
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