Altas temperaturas y vacaciones impactan al comercio

Durante junio y julio, comerciantes de la región atraviesan un periodo complejo marcado por bajas ventas, altos costos operativos y un descenso en la afluencia de clientes, debido al ciclo vacacional, las graduaciones y las temperaturas extremas, que superan los 40°C a la sombra.

Para muchos comerciantes locales, junio y julio representan el mayor desafío del año, especialmente en sectores como ropa, calzado, electrónica y alimentos preparados, donde la rotación de mercancía disminuye considerablemente. La combinación del periodo vacacional escolar, eventos sociales como graduaciones, y el calor extremo, provoca un cambio en los patrones de consumo.

Las familias salen de la ciudad, priorizan otros gastos o simplemente evitan salir debido al calor, lo que impacta directamente en los ingresos de pequeños y medianos negocios.

Consumo eléctrico y mantenimiento elevan los costos

A la baja en ventas se suma el aumento en los costos operativos, siendo el consumo de energía eléctrica uno de los principales factores de preocupación. Ante las altas temperaturas, los sistemas de refrigeración y aire acondicionado trabajan al doble de su capacidad, generando recibos de luz elevados que comprometen la rentabilidad de los establecimientos.

Comerciantes como Héctor Rodríguez, han señalado que incluso con mantenimiento preventivo, los equipos suelen fallar por la sobrecarga, afectando tanto la atención al cliente como la conservación de productos perecederos.

Impacto económico: cifras que preocupan

Aunque no existen cifras oficiales para el municipio, asociaciones comerciales locales estiman una caída promedio del 20% al 30% en las ventas durante junio y julio en comparación con los meses previos. Este fenómeno no es exclusivo de Piedras Negras: en regiones con climas similares, como Monterrey o Torreón, se han reportado dinámicas similares de desaceleración comercial en temporada de calor extremo.

¿Qué productos dejan de venderse más? Tiendas de conveniencia, papelerías, restaurantes pequeños y tiendas de ropa de temporada son las más afectadas, mientras que el sector de abarrotes y bebidas frías muestra ligera estabilidad.

¿Cuándo se recupera el comercio?

Los comerciantes locales prevén que la normalización de las ventas comience a mediados de agosto, cuando inicien los preparativos para el regreso a clases. Esta etapa activa nuevamente el flujo de consumidores, particularmente en rubros como ropa, calzado, útiles escolares y tecnología.

Muchos establecimientos ya están planificando estrategias promocionales, como descuentos por temporada, ventas nocturnas y meses sin intereses, con el objetivo de reactivar el consumo local durante el segundo semestre del año.

Retos y adaptaciones del comercio local

Frente a este panorama, los negocios están adoptando medidas para mitigar el impacto, entre ellas:

• Ajustes de horarios para evitar los momentos de mayor calor.

• Promociones cruzadas con otros comercios locales.

• Digitalización y ventas en línea, que permiten mantener contacto con los clientes fuera del horario o clima habitual.

• Reducción temporal del personal o reestructuración operativa.

Estas estrategias buscan sostener la operatividad mientras se atraviesa esta etapa crítica para el sector comercio, en espera de mejores condiciones.

¿Cómo apoyar al comercio local?

Los consumidores pueden colaborar con el comercio de su comunidad mediante acciones simples como:

• Comprar productos locales.

• Participar en promociones de temporada.

• Evitar el regateo excesivo.

• Difundir comercios por redes sociales.

Estas prácticas ayudan a mantener activa la economía local y garantizan la supervivencia de pequeños y medianos negocios.

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